ARTÍCULO FINAL
Llegó la hora de finalizar el curso, y con esto damos paso al
último bloque de la asignatura. Iremos recordando las ideas clave que hemos
aprendido durante la asignatura, así como todo lo que nos han aportado.
La primera infancia es una etapa
clave para relacionar a los niños con la literatura porque es cuando podemos
hacer que formen sus primeros hábitos y actitudes hacia ella. En principio a
todos los niños les gusta la literatura, y la labor del maestro debe orientarse
a potenciar y desarrollar esa afición. Para ello resulta fundamental que los
niños no solo se limiten a escuchar o a leer, sino que también se sientan
partícipes de ella, y aquí es donde entrará nuestro papel como maestros.
Al inicio de esta asignatura, he ido
creando una idea nueva acerca de la literatura infantil ya que, tan
acostumbrados a tratar de etiquetar las cosas bajo los conceptos de "bien"
o "mal", hemos olvidado un
poco lo estético por centrarnos más
en lo ético.
La principal idea con la que me
quedo es que la función más valiosa de la literatura infantil, como toda
literatura, es ofrecer el entretenimiento
y sobre todo el placer hacia ella; su
función primaria es puramente estética, la de promover en el niño el gusto por
la belleza de la palabra, más allá de cualquier otra finalidad formativa.
BLOQUE 1: ANÁLISIS Y SELECCIÓN.
En este primer bloque, he tenido la
oportunidad de aprender la diferencia entre los conceptos de literatura y paraliteratura, algo que desconocía por completo; por un lado, la
diferencia entre ambos conceptos, y por otro, que se podían alcanzar diferentes
fines a la hora de seleccionar el tipo de libro. De este modo, la
paraliteratura no concibe el principio de belleza en sí misma sino a través de
una utilidad, a diferencia de la literatura, la cual tiene como objetivo el
placer y el entretenimiento. Tal y como explicó nuestra profesora, esto no
implica que la paraliteratura sea de peor calidad, simplemente tenemos que
aprender a darles usos didácticos diferentes.
En mi caso, me limitaba a escoger
cualquier libro según el momento en el que los niños se encontraban (para
finalizar una asamblea, antes de comer, etc.), los valores que quería
transmitir, o simplemente lo dejaba a libre elección de los alumnos. Con esto
quiero decir que desconocía la cantidad de elementos que podemos diferenciar para
poder alcanzar distintos objetivos según la etapa en la que se encuentren
nuestros alumnos.
Sin embargo, he podido aprender
algo que ahora veo fundamental a diferencia de antes, y es diferenciar una
serie de características a la hora de decantarme por un libro, su aspecto físico, el tipo de texto, los temas que se tratan, la importancia de las ilustraciones, y lo más importante, asociar cada uno de estos
aspectos a las características
evolutivas del niño, ya que tendrá distintas motivaciones según en la que
se encuentre.
Tras
haber tenido esta primera toma de contacto tan intensa, y que me dejó tan
descolocada en relación con mis conocimientos previos, he llegado a la
conclusión de lo importante que es que, tanto los futuros maestros, como los
que ya se encuentran ejerciendo esta profesión, reciban formación sobre
literatura infantil, en este caso.
En mi
opinión, la falta de conocimientos acerca de este campo, están impidiendo que
los niños consigan adquirir un buen gusto por la literatura y el afán de leer
por placer; y por el contrario se está realizando un uso incorrecto de la
literatura, ya que por lo que he podido observar hasta ahora, en la mayoría de
los casos ésta se emplea con fines únicamente didácticos, presentándola como un
conjunto de contenidos que han de aprender, en lugar de transmitirla como una
serie de vivencias y experiencias con las que los niños pueden entrar en
contacto.
BLOQUE 2: TEXTOS FOLCLÓRICOS.
Al comienzo de este nuevo bloque,
ya me había hecho a la idea de que, al igual que en el anterior, el concepto
que tenía sobre los textos folclóricos se quedaría, una vez más, en la
superficie, y así fue. Principalmente entendía el folclore como un símbolo de tradición,
propio de la cultura popular de hace muchos años. Sin embargo, existen aspectos
muy importantes a tener en cuenta a la hora de entender qué es un auténtico
texto folclórico.
Gracias a este bloque he podido
descubrir que no se trata de cuentos que pertenezcan a un autor concreto, sino
que proceden de la tradición oral del “boca a boca” y tiene tres
características fundamentales: el anonimato,
la oralidad y la multiplicidad de variantes; algunos de
los adaptadores más importantes han sido Perrault o los hermanos Grimm.
Estas variantes surgen dependiendo
de la época y la situación, otro aspecto que me llamó muchísimo mi atención fue
en relación a esto, ya que son textos folclóricos adaptados, no es el relato original; personalmente desconocía que los
cuentos folclóricos no son originariamente para niños en la mayoría de los
casos, y por consiguiente, que muchas historias realmente tuviesen un final
distinto al que siempre había conocido, esto ocurre por ejemplo con Disney, un
medio que había formado parte de mi entretenimiento toda mi infancia. Por otro
lado, las moralejas no eran comunes ya que su principal objetivo era lúdico.
Una vez conocido el verdadero
significado de los textos folclóricos, llegó el momento de la incorporación de
la literatura oral tradicional en la escuela. Gracias a la actividad del bloque
comprendí que, al contrario que ocurre con los libros de autor, no debemos
pretender que los más pequeños traten de identificarse con ellos, sino que
aspiren a ser como ellos.
Una de las ideas que más
consideraré como futura maestra es la de no confundir “moraleja” con “enseñanza
moral”. De este modo, he aprendido que no hay que explicar los cuentos y
sus moralejas a los alumnos, sino que hay que dejar que decidan ellos lo que el
texto les está transmitiendo, y, sobre todo, potenciar esa reflexión. Gracias a
esto he podido darme cuenta del gran error que he estado cometiendo hasta
ahora, ya que he impuesto mi propio criterio moral y no he infravalorado que
los niños, a pesar de su corta edad, son capaces de establecer significados simbólicos.
Personalmente, por lo que he podido ver, la mayoría de profesores cometen el
mismo error, por eso este bloque ha hecho que me pregunte ¿Estamos favoreciendo
el aprendizaje emocional de los niños?, ¿Respetamos y potenciamos las
capacidades de nuestros alumnos? Para que la respuesta sea “sí”, creo que todos
los docentes deberían recibir formación sobre cómo enseñar una literatura de
calidad a los alumnos.
Para evitar que esto vuelva a
suceder, antes de lanzarme a realizar esta actividad sin ninguna preparación previa,
seleccionaré una serie de cuestiones para posteriormente plantearlas; así permitiré
que mis futuros alumnos puedan poner en común lo que han entendido, juzgar la
forma de actuar de los personajes y las enseñanzas extraen de la historia.
Como futura maestra, creo que
enseñar el folclore en la escuela es un modo de evitar ser tragados por la
globalización y sobre todo son una buena herramienta para promover la reflexión
de los niños, estimulando su pensamiento crítico.
Por último, creo que también tienen
una gran importancia ya que fomentan el amor por la lectura, y aunque se
transmitan de forma verbal, son capaces de estimular el deseo de descubrir
nuevos mundos a través de la lectura.
BLOQUE 3: LA HORA DEL CUENTO.
En primer lugar, he de confesar que
cuando leí el título de este bloque, pensé que se me iba a dar bien y que esta
vez me manejaría perfectamente en este campo, debido a mi experiencia previa
contando cuentos en mi trabajo. Sin embargo, igual que en los anteriores
bloques, esta asignatura no me ha dejado de sorprenderme.
En primer lugar, he aprendido las tres
formas diferentes de transmisión
literaria y los aspectos a tener en cuenta para trabajar con los niños
según la que se haya escogido, pero sobre todo la importancia de que es un
momento de placer y disfrute tanto para niños como adultos.
A la hora de realizar la actividad,
he podido poner en práctica todos los conocimientos que he adquirido en los
anteriores bloques, algo que me ha servido de mucha ayuda para comprender mejor
la finalidad de la asignatura.
He aprendido que la narración de
historias tiene como principal objetivo fomentar
la imaginación de nuestros alumnos, a partir de lo cual surge el placer por
las historias y la lectura. Además, la interactuación
es una herramienta imprescindible para ayudar a embellecer la historia y
darle mayor credibilidad, de tal manera que les permitimos recrear una historia
desde su propia realidad.
Ya que previamente desconocía todos
estas pautas y conceptos a tener en cuenta, siempre he considerado este taller fácil
y simple sin apenas preparación previa. Simplemente trataba de entretener a los
alumnos con cuentos. Sin embargo, he aprendido a seleccionar las estrategias y
a adaptarlas a la edad de los receptores. También he podido apreciar de primera
mano, el increíble cambio que presenta esta actividad cuando preparas la
historia, la tonalidad con la que la cuentas según cada momento, el empleo de
gestos y mímica…
En la actividad práctica escogí la
estrategia de cuentacuentos, la cual es mi favorita debido a mi experiencia
previa. Además, personalmente creo que es la más completa y la más favorecedora
para el desarrollo de la imaginación y de su capacidad reflexiva.
BLOQUE 4: CREACIÓN DE TEXTOS
LITERARIOS.
La actividad y puesta en práctica
de este bloque es la que más me ha costado. Las creaciones de textos que correspondiesen
cada uno con uno de los géneros literarios, me han traído verdaderos
quebraderos de cabeza, ya que no lograba decidir qué estrategia emplear en cada
uno, escoger la temática de las historias, etc.
Sin embargo, a la hora de seleccionar los temas, los tipos de
texto y su estética literaria, las ilustraciones y adecuación de los diferentes
aspectos del texto al momento evolutivo de los receptores, no tuve ningún
problema, debido a que lo trabajado en los anteriores bloques me facilitó
muchísimo el trabajo, y me hizo ser consciente de que todo lo aprendido estaba
empezando a dar sus frutos, lo que me hizo tomar más confianza para continuar
con la actividad.
Por otro lado, disfruté mucho con
la oportunidad de convertir uno de mis textos a formato físico, además esto ha conseguido
que establezca la idea de que los maestros puedan crear sus propias historias y
libros para poder darles uso en el aula. Creo que es muy gratificante hacer
disfrutar a los niños de la literatura mediante algo que ha sido fruto de tu
creación, tus conocimientos y de tu trabajo personal.
BLOQUE 5: BIBLIOTECA DE AULA Y
ANIMACIÓN A LA LECTURA.
Sin ninguna duda, éste último
bloque ha sido el que más he disfrutado con diferencia, y creo que esto queda
reflejado en la actividad práctica de la creación del rincón de lectura.
Nunca había sido consciente de lo
que un espacio de lectura puede influir, tanto en el aula como en sus alumnos.
Todos los pasos previos que hay que seguir antes de establecer un rincón, fueron
algo totalmente nuevo para mí: buscar un sitio estratégico en el aula para situar la biblioteca, darle importancia
al diseño, de tal manera que se
convierta en un espacio que invite a los niños a disfrutar de un buen rato de
lectura, realizar un estudio de todos y cada uno de los libros que van a formar parte de este espacio y, lo que más llamó
mi atención, la manera en la que será gestionado,
ya que nunca había pensado que después de llenar el rincón de libros, hubiese
una organización más allá de renovar alguno que otro más adelante, cuando los
niños se hubiesen cansado de ellos o si se encontraban demasiado deteriorados. Por
el contrario, resulta de gran importancia que estipulemos una serie de momentos
para leer y conseguir crearles hábitos de lectura, y alguna actividad para
darle mayor dinamismo a nuestro rincón; un ejemplo de esto sería introducir el
préstamo de libros, por ejemplo. Además, gracias a este trabajo he aprendido el
importante papel de la animación y la dinamización,
además de un gran número el uso de dinámicas y actividades literarias para
conseguir el acercamiento de los niños a la literatura.
Tras haber adquirido todos estos
conocimientos, los cuales previamente ignoraba, he podido comprobar que, para mí,
existe un antes y un después; el motivo es que cada vez que entro en un aula,
una de las primeras cosas que trato de localizar es su rincón de lectura, y lo
analizo teniendo en cuenta todas las características para así comprobar si
realmente cumple con los objetivos de una buena biblioteca de aula. He de decir
que, lamentablemente, la mayoría de ellas no tienen un aspecto especialmente
cuidado, sin tratar de que sea un espacio diferenciado en el aula para que
adquiera mayor importancia para los alumnos. Suelen encontrarse bastante
descuidadas, sobre todo los cuentos, que están deteriorados, les faltan las
tapas o incluso algunas páginas. Todo esto no anima a los niños a querer darle
uso a este espacio, ya que otros espacios del aula son mucho más atractivos y
llaman su atención. Además, el uso de tablets y pizarras digitales ha hecho que
los maestros sustituyan la hora del
cuento por la visualización o la escucha de un simple vídeo, algo que aleja
a los niños por completo del gusto por este arte, ya que se pierde la interactuación,
el uso de la imaginación, etc.
Personalmente, creo que, tras haber
conocido todas las cualidades, los beneficios y los objetivos de la literatura,
voy a conseguir un objetivo que hasta ahora no tenía: contagiar la animación a
la lectura a mis futuros alumnos, y transmitirles mi gusto hacia ella.
Muy bien. Tocas todas las cuestiones que se solicitan excepto la bibliografía. Hubiera estado bien que desarrollases más la teoría y la reflexión didáctica.
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